Qué ilusión ver a nuestros niños crecer y a sus padres disfrutar de ello.
Hace ya un año que Ángel pasó por delante de nuestras cámaras y nos sedujo desde el primer momento.
Hace ya un año que Ángel pasó por delante de nuestras cámaras y nos sedujo desde el primer momento.
Nos fue visitando cada tres meses durante un año, la timidez era vencida poco después de comenzar cada sesión, dando paso a una dulce espontaneidad que nos permitía disfrutar de su sonrisa sincera cada día.
Cuatro fueron las veces que gozamos de su naturalidad y con todas las fotografías hemos preparado un álbum precioso que queremos compartir con todos vosotros.
Se le echará de menos ahora que ya ha terminado el seguimiento pero nos quedamos para siempre con esos deliciosos momentos de diversión, alegría y amor que nos ha regalado durante el último año. Un regalo que se antoja eterno en nuestro recuerdo, una de las principales cualidades de una fotografía hecha desde el corazón y el más profundo de los sentimientos.
Su madre nos ha dejado unas palabras que queremos compartir con todos vosotros:
<< ... Las madres me comentan que lo disfrute porque ya casi no recuerdan cómo era su niño a esa edad. Yo me arrepiento de no haber empezado antes el seguimiento porque durante el primer año se le nota más el cambio ... >>
No hay comentarios:
Publicar un comentario